Introducción

“Valdivia, ciudad bella”.
Bosques, ríos, cuencas, humedales, parques naturales y urbanos, y la red fluvial más grande del país, nos reflejan el fuerte carácter que posee la ciudad, en cuanto al ámbito medio-ambiental.
Valdivia, es una urbe que esta envuelta de riquezas naturales, otorgándole un sello identitario, y una ventaja a su desarrollo, que se enfoca principalmente a múltiples actividades relacionadas con el turismo de naturaleza.
Pero, tras esta belleza cautivadora, ocurre una silenciosa y progresiva realidad, LA BASURA, que llega a invadir e interrumpir estos espacios “naturales”, a corroer la limpieza visual, a interrumpir lugares que se tornan vulnerables a la necesidad humana de despojarse de lo que ya no sirve, “de lo sucio”.
Estas “interrupciones” se logran, muchas veces, visibles, reflejo evidente de la inconciencia ciudadana con su entorno, con su medio, en otras estas interrupciones tiene la posibilidad de continuar un ciclo distinto al de ser desecho, y por ultimo a la mudes absoluta.